# 105 Otro mierda-post

Hoy desperté deprimida. Hace tanto que no me invadía ese sentimiento gris de esta manera. Sólo un hueco, sólo un puño airado en el lugar que debería ocupar mi corazón.
Ayer por la noche, camino a mi casa, sentí que me derrumbaba, era irremediable esta caída. Me detuve, decidí sentarme y tratar de respirar. Recordé tus palabras aquella noche, ese sentimiento constante de tristeza del que hablaste; y me di cuenta, o recordé, mejor dicho, que hace mucho que no estoy plenamente contenta. No plenamente, sólo a momentos. Pero siempre está ahí esa melancolía, esa marca que me han dejado estos años de soledad y desesperanza.
Es inevitable cuestionarme si las cosas serán diferentes para ti ahora, no ha pasado suficiente tiempo, es lo que me digo, me pregunto también si con ella sentirás, si con ella te abrirás de la manera en que sentí que lo hiciste conmigo. No sé por qué me pregunto todas estas pendejadas, sé que no te importan y a mí tampoco deberían importarme, es muy tu pinche vida, muy aparte ya de la mía.

Luego los sueños nuevamente… todo lo que vi dentro de mí anoche fue lo que me ha hecho ponerme así… lo que me ha hecho volver al ensimismamiento al que tanto recurro cuando soy incapaz de darme o darle al mundo una explicación.
A la chingada.